Problemas de alimentación en personas con condición del espectro autista.

En este cierre de año se hablará de las ramas que conllevan los problemas en personas con condición del espectro autista; para iniciar sobre este ámbito, se empieza por los padres, la sobreprotección que uno ejerce sobre los hijos, a veces solo se ejerce estando e interactuando con ellos en un tiempo determinado, y aparte de esa atención y de ese tiempo, fuera de casa, en la escuela y en convivencia los niños crean sus propios hábitos alimenticios como expresiones.

En este caso, no importa que como padres demos a entender que nosotros somos la autoridad, y así mismo, no hacemos a nuestros niños tiranos (hacerles creer que están enfermos) y ponerles límites, sin percatarse de que el niño sea poco especial, menos especial o muy especial, tratarlo como tal en pocas palabras.

Cabe destacar que donde no hay disciplina se crea la tiranía, y donde existe la tiranía empieza el desorden, todos somos limitados y disfuncionales, pero con disciplina todo se vuelve funcional; si los niños no efectúan los aminoácidos en la alimentación, no habrá transmisores para llevar nutrientes al cuerpo y eso hace que los niños no tengan una buena alimentación; y ese ámbito que se tiene que empezar desde una corta edad. No cumpliendo caprichos como aperitivos dañinos, que causan alteraciones, y riesgos en la salud, que bien, nosotros los padres sabemos que no es lo correcto.

Sobre todo, si quiere el bienestar de su hijo se tiene que tener sentido común, empezar con el ejemplo, irradiar una buena vibración hacía con los hijos, empezando por no angustiarse, desesperarse, alterarse, comer mal, en sí, no tener malos hábitos y mucho menos hacerlos notar delante de ellos.

Establecer un orden dentro y fuera de casa pero sin atorarse, relacionando e interactuando para completar los complementos alimenticios y de más, dándoles los alimentos que contengan triptófano y tirosina que conforman la serotonina que crea la tranquilidad de los niños en total plenitud. Si quieres un hijo con emociones y comportamientos adecuados, evita todo lo que no contenga proteínas y componentes de una buena alimentación; y sobre todo no premiar con pequeños aperitivos, porque desde ahí es donde se empieza un mal hábito y una alimentación desordenada y sin disciplina, donde las consecuencias son para los mismos padres.

Disciplina sobre todo, no darles alimentos que solo por la destacada marca, los azúcares, supliendo los alimentos importantes por los no importantes, el mal aspecto de algunos alimentos, no darles los alimentos que a nosotros no nos gustan sabiendo que son productivos para nuestros niños.

Referencias

Cristina O., (5 de diciembre); Problemas de alimentación en personas con colisiones con espectro autistas [Audio]; Guadalajara:

Fundación HACE, FAMES.